La política ficción o la política de la apariencia

Hola, soy Javier Martínez Sáez, conciudadano de Vitoria-Gasteiz. Estoy muy enojado por lo que veo y conozco día a día en la ciudad que amo.

Como muchas personas sabéis, me presento para alcalde en nuestra amada ciudad, Vitoria-Gasteiz. Inicialmente y viendo todo desde fuera estaba HARTO de cómo se hacía y se hace política en nuestra ciudad, en nuestra comunidad autónoma vasca y en en cualquier ámbito en general. Todo el mundo con sentido común me decía si estaba seguro de dónde me metía…y yo siempre contesto lo mismo y es que tengo vocación por hacer las cosas de una manera distinta, que tengo vocación por ayudar. Pero es que tienen razón, la política es un asco hoy en día y explicaré qué me ha pasado hoy jueves en nuestro 40 aniversario de la constitución española.

Casi tod@s mis conciudadan@s leyeron o conocieron ayer por el boca a boca que un estudiante del campus de Álava de la UPV recibió una paliza por parte de 15 encapuchad@s por pensar políticamente diferente a ell@s.

Tod@s l@s habitantes de la ciudad coinciden en que esta violencia es deleznable y así, tod@s los partidos políticos y sus estandartes lo hicieron público en sus perfiles de rrss. Mi grupo político, Libres por Euskadi, y yo también lo hicimos. Es obvio, no hay posibilidad de defender la violencia. No hay posibilidad de defender el fascismo. El respeto y la libertad de cada individuo es un derecho que nuestra constitución debería avalar y en ello confío yo. Hasta aquí tod@s estamos de acuerdo, ¿no?

Bien, ayer a la tarde noche me entero que hoy habría una concentración en la facultad de letras, lugar donde el alumno estudia, para denunciar estos hechos. No sabía quién había convocado el acto pero ni me lo pensé ni tampoco lo puso en duda ninguno de mis compañer@s de nuestro Comité Ejecutivo de Vitoria-Gasteiz de LxE.

Allí hemos estado dos compañer@s y yo mismo. He acudido a las 11:40 h de la mañana del 6 de diciembre del 2018, 40 aniversario de nuestra constitución, y allí estaban algunos medios de comunicación. Poco a poco veo llegar a algunas personas, a todas conocía y todas eran de la misma formación política. Allí fueron congregándose todas las primeras espadas y también nuevas generaciones de ese partido. Pero nadie más había salvo mis dos compañer@s y yo y si acaso dos o tres personas más.

En ese momento estuve reflexionando porqué ningún conciudadano más iba a a apoyar una denuncia contra este tipo de violencia que atenta contra nuestros derechos individuales de libertad, respeto y convivencia. En ese momento alucinaba, iban pasando los minutos y se iba desarrollando el acto, con la pose en las fotos y la lectura del comunicado. Todo muy partidista, calculado. No interesaba nada más que salir en prensa, más que hacerse la foto y ponerse la medallita. El discurso empezó bien pero según se iban alejando de los derechos que veníamos a reivindicar y se acercaban a los objetivos de ese partido que no eran otros que ser adalides de esos mismos derechos, de apoderase gratuitamente de hechos pasados y de apropiarse de lo sucedido con este estudiante, me entraban ganas de vomitar. Sentía vergüenza ajena por cómo iba desarrollándose todo. No os creáis que nos invitaron a las personas ajenas al partido a incorporarnos a la foto. No, no fue así. Ciertamente tampoco hubiera ido porque se veía lo que pretendían y no era más que hacerse la foto y darse a notar en una situación que nada les correspondía directamente a ello o eso creo yo.

Acaba el acto y todo acaba saliendo según ellos había previsto.

Ahora viene mi punto de vista y es que la realidad es que hoy han hecho un flaco favor a la sociedad gasteiztarra y vasca. Hoy debería de haber sido un acto de unión de todos los demócratas, de todos lo que estamos en contra de cualquier tipo de violencia, en este caso como consecuencia de diferencias políticas. Eso tenía que haber sido pero no ha sido así. Ha sido un acto de separación, de ponerse la medallita y de hacerse notar en prensa, punto.

y ¿por qué?, Pues porque el partidismo y las ideologías políticas son la mayor lacra de la sociedad moderna de estos dos últimos siglos, más aún en un ámbito municipal. Mi opinión es que al partido que convocó el acto no le interesaba invitar a más formaciones políticas y así ponerse la medallita y poder destacar en algo que no era el único que lo defiende pero…su partidismo ha hecho que sea así. Su sesgo ideológico y su afán de obtener votos frente al bienestar común, frente al progreso unidos en este sentido de la NO violencia ha hecho que todo aconteciera como ha acontecido.

Por otro lado, el resto de formaciones políticas no andan lejos de este mismo problema. Si mi formación política se enteró y si todos los medios de comunicación se han enterado, estoy seguro de que el resto de formaciones políticas lo han hecho pero….han ido? NO…y por qué no han acudido? Por la misma razón y es que el sesgo ideológico, el depender de una estructura de partido donde lo municipal es lo más bajo y que ejecutan órdenes de sus órganos internos con más poder o de sus cúpulas de partido hacen que ningún partido político haya acudido a la cita. Pero sobre todo, de su incapacidad para defender unos derechos individuales y democráticos, tal y como se ha visto hoy,  con este chaval que tuvo las narices de expresar lo que pensaba y sentía. Sin embargo, ningún partido ha acudido a excepción del convocante y de Libres por Euskadi.

Por todo esto me siento apenado. Además, también me apena que casi ningún conciudadano haya acudido. Seguramente porque al partido convocante no le interesaba y así hacerse la foto. Todo tiene que ver y es que la lacra del partidismo hace que el progreso como sociedad no sea tal. Somos meros espectadores de la nefasta política actual. Esto se ha convertido en un sálvame delux de la política donde no se avanza en nada. Y para acabar de aliñar la ensalada acabo de leer un titular en prensa que dice «Vitoria exige la detención de los 15 encapuchados que atacaron a un joven». Después de leer esta opinión, juzguen ustedes mism@s, irónico, ¿verdad?

Les cuento una anécdota y es que en el pasado pleno municipal de Vitoria-Gasteiz, pleno que se celebra una vez al mes y que suele durar 7 horas aproximadamente, estuvieron hora y media o más hablando sobre si monarquía o república. Se tiraron casi la cuarta parte de un pleno en hablar de cosas que no les competen y que no tienen poder de decisión. ¿Pero no hay problemas en Vitoria-Gasteiz? Pues claro que los hay y un servidor que tiene tomado ya el pulso a la ciudad y sus problemas fundamentales sabe y les afirmo que los hay. Es realmente indignante la forma de hacer política en la actualidad y es por todo esto que nosostr@s estamos aquí. Porque esto nos preocupa enormemente y porque nosotr@s sí que queremos avanzar como sociedad gasteiztarra, cuidando a nuestros conciudadanos y pasando en moto de la política ficción que hoy en día se lleva acabo donde todo es apariencia pero nada es progreso.

Para finalizar les digo una cosa que muchos no sabrán y que recientemente me causó vergüenza ajena y es que hoy en día si una persona sordo-muda fuera al hospital, a urgencias, no hay nadie capaz que poder entenderla. Vitoria-Gasteiz, 2018, primer mundo…ahí queda eso…pero no se preocupen que mientras los políticos se hagan la foto y mantengan su poder, los conciudadanos de Vitoria-Gasteiz y Euskadi les importamos bien poco.

Es hora del cambio, es hora de pensar en nuestros conciudadanos, es hora de Libres por Euskadi, es hora de LxE porque #SomosComoTu y #EstamosContigo

Javier Martínez Sáez
Candidato al ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz de Libres por Euskadi (LxE)